10 oct 2009
Senses in the skin
Título: Senses in the skin
Autor: NanaLove
Pareja: YooMin
Micky: Observador
Max: Periódico
Llevo rato observando cada uno de tus movimientos desde la penumbra de esta esquina del bar. Tu manera de llevarte el vaso lentamente hacia los labios, húmedos y carnosos, tus ojos que observan cuidadosamente las noticias en el periódico, y que a veces se desvían para mirar quien está alrededor de ti, pero a mí no me ves ¿cierto? Yo no puedo parar de mirar tus labios, tus movimientos y cada vez que mirabas y no me veías.
Decidí coger mis cosas, pagar la cuenta y dirigirme hacía donde tu estabas…Me atraías de una manera salvaje, aunque no te conociera de nada, ni tan siquiera supiese tu nombre, pero tu manera de moverte me excitaba y no soy de los que se suelen quedar sentados mirando sin hacer nada. Me acerque hacia tu mesa y me quede mirando tus ojos color chocolate y ese escote pronunciado que dejaba entrever tus pectorales y el color carne de tu piel.
Nos quedamos unos segundos con nuestras miradas cruzadas, pero cuando te diste cuenta de la tensión que había, bajaste la mirada y tapaste un poco tu cara con el periódico. Yo me dirigí hacia el lavabo para lavar mi cara, estaba un poco sudado, y cuando levante la mirada te vi a través del espejo como me mirabas fijamente.
Me di la vuelta y mire tu esculpido cuerpo, de arriba abajo descaradamente, me daba igual que lo notases. Poco a poco te fuiste acercando a mí, la verdad que me sorprendiste cuando te quedaste junto enfrente de mí. Me quede entre la pica y tu, y empezaba a notar todo tu cuerpo sobre mí, mientras acercabas tu nariz hacia mi cuello y empezabas a oler mi colonia, pasándola por todo mi cuello, escote y volvías a subir para quedarte mirando fijamente mis labios. Estuviste un buen rato así sin lanzarte pero con tu cara me lo decías todo.
Como no te decidías, ataque a tu cuello directamente mordiéndolo, pero de repente empecé a escuchar voces acercándose hacia el lavabo y te cogí por la cintura y te metí en uno de los baños.
Ahora yo tenía el control, te empotre contra la pared del baño, no tenias escapatoria, y empecé a morder tu cuello dejando pequeñas marcas rojas. Relamí cada parte de tu cuello, escote y fui abriendo poco a poco tu camisa, para poder acceder mejor a tus pectorales, tus pezones…e ir bajando lentamente hasta llegar a tu ombligo y rodearlo con mi lengua, suavemente.
Volví a subir para llegar a tu boca, y rodearlo por fuera con mi lengua, hasta quedarme quieto mirándote a los ojos. Soltabas algún gemido de placer. Cuando te diste cuenta de que había parado, me miraste un segundo y directamente fuiste a atacar a mi boca, llegando hasta mi garganta y consiguiendo quitarme toda la fuerza me empotraste de tal manera contra la puerta, que me estabas excitando cada vez más, eras tan salvaje, tan sucio… y eso me encanta.
Estábamos tan excitados, notaba tu erección en la mía rozándome de arriba abajo, con ese sensual movimiento de caderas, mientras relamías de mi boca hasta mi cuello, pasando tu lengua por mi barbilla bajando hasta la marcada nuez de mi cuello y rodeándolo todo después, para seguir por mi clavícula, hombros, pezones y ahí te paraste y empezaste a sacar tu lengua y lamer mis marcados pezones, para después darles pequeños mordiscos, y hacer que me volviera más loco…más excitado de lo que ya estaba… No paraba de gemir, como un perro en celo. Ya cuando te cansaste, pasaste toda tu lengua desde el pezón hasta el ombligo, y te separaste de mí para quedarte mirando mi abultado pantalón. Alzaste la mano hasta el bulto para empezar a rozarlo suavemente, y yo no paraba de gemir y gemir, y eso parecía que te gustaba porque empezaste a acelerar el ritmo del roce y metiste la mano suavemente en tu pantalón, y empezaste a masturbarte, mientras decidiste sacar tu lengua y pasarla por encima del pantalón, por encima de esa parte tan sensible… Me gustaba tanto ver cómo te masturbabas y me masturbabas a mí a la misma vez, agarre tu pelo con una mano y apreté un poco para que siguieras con lo que estabas haciendo y con la otra me cogí a la parte superior de la puerta. Ya te habías cansado de lamerlo exteriormente, querías algo mas y lo tuviste…Me bajaste la cremallera del pantalón, para poder bajarme el pantalón hasta las rodillas y bajarme un poco los bóxers y agarrar mi miembro totalmente excitado con tu boca sedienta de comerlo. Lo relamías tan salvajemente pero a la vez suave y eso lo hacía aun más excitante, de arriba abajo disfrutabas cada trocito de carne y yo de cada segundo que lamias mi miembro…Sentía que me iba a correr en cualquier momento y tu parecía que también porque había aumentado la velocidad con la que te estabas tocando. Si tu ibas más rápido yo iba más rápido ya estaba llegando al orgasmo, pero quería que llegáramos los dos a la vez, no sabía si íbamos a llegar a la vez pero yo ya no aguantaba más…Solté la parte superior de la puerta, pero apreté tu cabeza contra mi miembro porque quería correrme en ti, tragaste todo lo que pudiste y lo demás quedo en los bordes de tu boca, mientras tú te corrías dejando toda la puerta y suelo manchados.
Con las pocas fuerzas que me quedaban te cogí de un brazo y te subí hasta quedar en la altura de mis ojos, y cogerte con fuerza de la cara y acercarla hasta la mía para consumirnos en un beso, intercambiando nuestras salivas y entrelazando las lenguas. Pare de repente me quede mirando tu cara de placer y te cogí de las manos para, de un golpe, empotrarte contra la pared del baño dejando tus manos por encima de tu cabeza, estabas inmovilizado y mientras me mirabas con cara extraña pase toda mi lengua desde tu boca hasta tus pezones recorriéndolo todo para volver a quedarme enfrente de ti con mi sonrisa perversa y girarte para dejarte contra la pared y arrancarte la camisa, pasando toda mi lengua por ella para después poner mi manos en tu cintura hasta llegar a tu miembro flácido que parecía volver a querer que lo tocasen y yo acate las ordenes, empecé a rozarlo con la yema de los dedos mientras tu apoyabas la cabeza en la pared notando mi roce en tu miembro, pero como quería que siguieras así deje de tocarlo y por tus gemidos note que no querías esa ausencia ahí, pero yo quería darte algo mejor así que cogí con todas mis fuerzas tus pantalones y los baje salvajemente, bajando con ellos también los bóxers y me agache para poder observar la firmeza de tus nalgas, tocándolas con mis manos y proporcionándoles algún que otro chupetón dejando pequeñas marcas rojas, pero yo quería algo más así que abrí un poco tus nalgas para ver mi destino, te mire y te vi tan excitado que no pude resistir la tentación de meter poco a poco un dedo para ver como reaccionabas, en ti había una mezcla de dolor y placer que no supe bien como tomármela pero metí otro dedo para luego meter el tercero y prepararte, entonces me levante de mi posición de rodillas, para volver a quedarme de pie y meter poco a poco mi miembro en tu entrada para que te fueras acostumbrando porque parecía que te dolía mucho así que espere unos segundos a que tu cuerpo se acostumbrara a la intrusión y luego empecé a subir y bajar, acelerando el ritmo y como veía que estabas completamente excitado gimiendo decidí coger tu miembro y empezar a masajearlo, también de arriba abajo, aumentando el ritmo con el que se movía mi cuerpo y tu cuerpo, pero lo que más se notaba era como tus gemidos iban en aumento. Aumentaba cada vez mas mi ritmo, aquel movimiento se estaba volviendo tan salvaje que sentía que me iba a correr en cualquier momento y tu parecía que también. Cada vez más rápido, más frenético, más excitante…Aunque no quería me corrí dentro de ti pero se sentía tan bien ahí dentro y tu igual te corriste en mi mano, la que luego fue a mi boca para relamer tu semilla.
Acabamos agotados, casi desnudos pero fue tan excitante…sexo entre dos desconocidos solo de pensarlo me entran ganas de volver a hacerlo.
-Mañana volverás…? – te dije mirando tu boca que aun respiraba con fuerza
-Si estas tu me pasare aquí todo el día en el baño…
FIN
--------------------
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 ♥Comentarios♥ :